PBL: LA CATEDRAL
Polipasto:

Teórico:
F=R/2n
R=3,5N
n=1
F= 3,5 / 2 · 1 = 1,75N
Práctico:
F= 1,7N
Plano inclinado:

Teórico:
F = R · senx
R = 6,5N
x = 33º
F = 6,5 · sen33 = 3,54N
Práctico:
F = 3,6N
REFLEXIÓN:
En esta práctica hemos recreado con sistemas de poleas y
planos inclinados lo que sería un escenario medieval. Hemos representado los
diferentes métodos que se utilizaban hace siglos para construir una estructura
arquitectónica de gran tamaño como por ejemplo una Catedral con los
instrumentos de los que hemos dispuesto. En este proyecto debíamos comprobar la
función de las poleas y polipastos en tiempos pasados donde no había tecnología
para ayudar en estas construcciones. Después de haber llevado a cabo una
búsqueda de los diversos conceptos y teoría que debíamos tener en cuenta antes
de empezar a trabajar, hemos buscado el material adecuado dentro del abanico de
posibilidades que se nos ofrecía. Previamente al inicio de la práctica, hemos
planteado en nuestras libretas y representado de forma gráfica como íbamos a
realizar la práctica para invertir nuestro tiempo de la mejor manera. Este ha
sido un paso muy rápido debido a que hemos dispuesto en todo momento de los
dibujos en moodle así que solo hemos adecuado cada uno de los casos a nuestro
material e ideas. Seguidamente hemos comenzado la práctica en si, que después
de cierto tiempo de montaje, ha logrado completar los diferentes objetivos
requeridos en la práctica y funcionar de la forma esperada.
Todo está plasmado de forma gráfica para comprobar la
fiabilidad del problema y de nuestro planteamiento.
Finalmente, al acabar la práctica hemos comprobado que, en
el caso primero, utilizar una polea sirve de poco, ya que la misma fuerza
transmitida por un lado de la cuerda, se transmite en el otro lado, tanto sea
este el que tira o el que es estirado. Sin embargo, pudimos deducir que la
ayuda que se puede conseguir utilizando una única polea es la de la gravedad.
Es decir, si una persona tira de un objeto hacia arriba para levantarlo, esta
tendrá que invertir una fuerza mucho mayor que no si está tirando de una polea.
Ya que en el caso de la polea, la persona que tira también dispone de su propio
peso que se suma a la fuerza que este/a persona haga para levantar lo que se
encuentra al otro lado de la cuerda.
En el segundo y tercer caso, pudimos demostrar la verdadera
función de las poleas. En primer lugar, utilizamos un polipasto con dos poleas,
donde comprendimos que la fuerza se divide en dos por cada polea que se añade
al sistema (empezando con la segunda ya que como hemos comprobado en el
problema anterior, la primera polea solo sirve para que la fuerza cambie de
sentido/dirección y en la mayoría de los casos, para que se pueda ayudar con el
propio peso). Nuestros resultados, como se puede observar fueron muy
concluyentes, ya que salvo un pequeño error instrumental, nuestra hipótesis fue
resuelta con éxito y finalmente comprobamos que a partir de la segunda polea,
la fuerza se va dividiendo por cada polea que se suma al polipasto. Este caso
bastó para terminar nuestra práctica y resolver nuestras preguntas y dudas
respecto al tema de las poleas. Como conclusión nos gustaría añadir, que este
ha sido un experimento muy aleccionador y gráfico, que sinceramente ha ayudado
a estructurar la información en nuestras mentes y tener un ejemplo referencial
para este tema.
FOTOS:
Polipasto:






Plano inclinado:



